Cuando el enemigo es la muerte


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

I. Una doctrina.

a.     Hay misericordia en el AT. Hay violencia en el NT. Los escritos paulinos son insustituibles a la hora de hacernos una idea del ministerio de Jesús. En las cartas encontramos dos rasgos bien definidos: la salvación que ha traído Jesús se expresa como una victoria guerrera y se nos hace viajar constantemente al AT

II. Los enemigos.

a.     Leer 1 Co. 15: 24-27. La muerte es el último enemigo de los hombres y por tanto de Jesús. Jesús es el prototipo del primer hombre: Adán. Si el Sr. Dios había puesto todas las cosas bajo los pies de Adán, ahora Jesús tendrá a todos los enemigos en la misma posición.

b.    La resurrección de Jesús es una victoria. Y el arma de esa victoria es la cruz. El enemigo derrotado es la muerte. Leer 1 Co. 15: 54. Así como los jinetes del Faraón fueron tragados por las aguas, ver Éxodo 15:4, La muerte corre la misma suerte ahora. La pasión de Jesús es una especie de éxodo.

c.     En la literatura bíblica podemos encontrar muchos símbolos. Por ejemplo el mar es símbolo por excelencia de la muerte. El mar es el que hunde, el que traga, el que absorbe. Cuando el enemigo es la muerte y es tragado por el mar símbolo de la muerte entonces volvemos a recordar ese principio que ya nos puede ser familiar de que la violencia se destruye a sí misma

III. El poder de Dios y la Ley.

a.     En Efesios nos tropezamos con este lenguaje guerrero una y otra vez. Leer Ef. 1:21. Cristo siempre está en posición de triunfador. Pero a la vez resulta interesante notar como todos estos poderes y potencias subyugadas por la acción redentora de Cristo tienen algo en común: los adversarios de Jesús figuran asociados a la Ley. Este es un punto crucial en la teología de Pablo.

 

VI. Algunas consideraciones sobre la ley y la violencia.

 

a.     Entre la mansedumbre original del Edén y la muerte de Jesús fue la Ley la encargada de reprimir la violencia entre los hombres y las mujeres. Pero la Ley produjo violencia ella misma también. Y se erigió un muro de sepracación entre los judíos y el resto de pueblos.  Con Jesús este muro es echado abajo. Y nada volverá a ser como antes.

b.    Pero esto no significa que el mal haya desaparecido. De hecho los anuncios en los escritos de Pablo es que nos preparemos para lo peor. La humanidad está para ser juzgada.  Leer 2 Tes. 2:8. La idea que atesora Pablo sobre la Ley esta resumida en algunas citas, veamos por ejemplo, Ro. 7:12 y Ro. 7:14. Pero para Pablo el pecado ha estado utilizando la Ley.

V. Una línea de conducta.

a.     En Pablo, la doctrina nuca va separada de la práctica. Ver Ro. 12:21. Después de rechazar la falsa mansedumbre, de que el amor sea sin hipocresía, Pablo insiste en la preeminencia del amor como respuesta no violenta. Pero sin renunciar a la victoria sobre el mal.

b.    El evangelio no nos da permiso para refugiarnos en el idealismo. Cuando Pablo escribe la carta a los romanos tiene esto en mente. Sabe que las autoridades, en este caso, el emperador romano puede hacer uso de la espada contra él o cualquier creyente. Algunos ven  en Ro. 13:7, el vestigio del viejo orden, donde la violencia se encarga de reprimir a los violentos.

c.     Pablo ni los demás autores del NT están intentando retirar de sus labios las palabras que a nosotros nos pueden o no resultar violentas contra los enemigos. Por tanto es normal que la iglesia haya mantenido en sus oraciones públicas estas palabras. Ver Salmo 70:13.

d.    Leer Apocalipsis 11:18

 VI. Compartir ideas y preguntas

 

 

 

 

 

 

 

 

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