Convicciones para el camino
I. Para leer una despedida. a. v.11. Según la costumbre antigua, la manera de autentificar un documento o carta era escribir las líneas finales con la propia letra del autor y estampar su firma. Pro en esta porción de la carta hay algunas señas o matices que son importantes de destacar. b. En primer lugar hay una introducción solemne. ¡Mirad con que letra….! Quizás alguno de nosotros se atreva a darle algún sentido a estas palabras. En segundo lugar se hace larga contra toda costumbre. No es lo habitual. La norma es que sean palabras escuetas. Y como última observación es digno de destacar que no encontramos saludos personales como si se pueden encontrar en otras epístolas. c. En los primeros versículos, reintenta poner de relieve los dos proyectos, opuestos, en la realidad de las iglesias de Galacia: el de los agitadores y el de Pablo. Y esto nos sirve para distinguir dos unidades literarias en esta última parte